La colaboración de los guatemaltecos hizo posible cancelar Q127 mil 350.88, que fue la cuenta final del sanatorio, luego de que la administración aplicara un descuento.
El niño debió ser ingresado a ese hospital debido a que su vida estaba en peligro y no recibió atención adecuada en el Centro de Salud de Fraijanes, donde vive, ni en el Hospital Infantil de Infectología, y no fue recibido en el Hospital San Juan de Dios debido a la falta de insumos.
“Irvin es un verdadero milagro. Gracias a la voluntad Divina. Estoy segura que Dios le depara una vida especial”, asegura Mireya Archila de Sánchez, quien tendió la mano a la familia Estrada.
El niño deberá recibir tratamiento ambulatorio para completar su recuperación. La familia agradece los aportes que los guatemaltecos hicieron a la cuenta monetaria o de forma directa al hospital.
Durante su estadía en el sanatorio, el bebé recibió la visita de personal de la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente, sin embargo, pese a un ofrecimiento para ayudar, la familia no volvió a tener comunicación con las trabajadoras sociales.
“Irvin representa emblemáticamente la excepción del triste destino trazado para muchos niños y adultos de escasos recursos de este país, que por las trágicas condiciones del sistema de salud pública no tienen esperanza, ni oportunidad de vivir. Gracias a la voluntad de Dios, Irvin escapó de ese destino”, reitera Archila de Sánchez.
Irvin Estrada regresa a su casa después de 15 días de estar en un hospital privado. https://t.co/7q8CBaLjRR pic.twitter.com/x6olASgMDp
— Andrea Orozco (@AOrozco_PL) June 22, 2016