“A esa ley le quitaron un montón de dientes y más parece un poema de amor”, cuestionó Roberto Villate, jefe del bloque de Libertad Democrática Renovada (Líder), que no apoyó la aprobación de la norma.
De acuerdo con Nineth Montenegro, de Encuentro por Guatemala, la ley “era necesaria”, y aseguró que se dejó abierta la posibilidad para que en el presupuesto para el 2014 se incluya un aporte de Q20 millones para el funcionamiento del Consejo Nacional de Cambio Climático.
Sin fuerza
Grupos ambientalistas que participaron en las discusiones durante ese tiempo, como MadreSelva, consideran que en la normativa se debió incluir una regulación sobre el cambio del uso de suelo y protección del agua.
“El cambio climático es producto de emisión de gases y contaminantes industriales. Tampoco hay regulación de los pesticidas y plaguicidas que se utilizan a discreción”, afirmó Julio González, de MadreSelva.
Ramiro Batzín, de la Mesa indígena de Cambio Climático, también señaló debilidades en la recién aprobada norma.
“La ley tendría que haber avanzado más en temas como el derecho de reconocimiento de pueblos indígenas. Lamentamos que la ley no tenga un financiamiento y la hace inútil”, dijo Batzín.
Proceso
Normativa fue aprobada ayer.
3 años tardó la iniciativa en ser aprobada.
92 diputados apoyaron la normativa.