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Niños sin escuela viven drama al ser trasladados a plantel en alto riesgo

Escuela fue instalada en un área que está en riesgo de deslave, en la zona 10 de Villa Nueva.

Escuela Bello Amanecer, en Villa Nueva. (Foto Prensa Libre: Carlos Hernández Ovalle)

Maestros y padres de familia de una escuela ubicada en la zona 10 de Villa Nueva, cerca del vertedero de Amsa, solicitan ayuda al Ministerio de Educación para sus niños, pues el establecimiento está ubicado en un área de riesgo de deslave y el número de profesores es insuficiente para la población escolar.

Una escuela de dos pisos, escritorios nuevos, un patio con juegos y aire acondicionado las aulas. Con eso soñaban los niños de la escuela de Plan Grande hace 4 años, pero esa ilusión se convirtió en desesperanza, pues ahora están en un lugar al borde del barranco y en riesgo, según lo dictaminado por la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred),

Además, están sumergidos en el mal olor que emana del vertedero de AMSA y sufren por las altas temperaturas debido al hacinamiento.

El panorama para niños de dos escuelas en la zona 10 de Villa Nueva se complicó luego que de una fuera cerrada en marzo de 2020 “por el peligro que enfrentaban”, por lo que los estudiantes fueron reubicados en un plantel que está en riesgo de deslave, según la Conred.

Pasillos y aulas de lámina abandonados evidencian lo que en enero de 2020 estaban destinados a unos 100 niños de la Comunidad Plan Grande. Ahora solo quedan dibujos y muebles empolvados. Este establecimiento era un anexo de madera en Nuevo Amanecer, que se había habilitado ante la demanda educativa. En su primera semana (7 de enero 2020) era una galera únicamente.

Sin embargo, fue cerrada entre febrero y marzo de ese año durante el gobierno de Alejandro Giammattei, luego de un reportaje de Guatevisión que evidenció la condiciones en las que los niños estudiaban, pero lejos de evaluar una posible construcción, se trasladó a los estudiantes al lugar que enfrenta riesgo de deslave, hacinamiento, falta de escritorios, maestros y una infraestructura que cada día colapsa.

“Hoy están peor que antes”, señalan padres de familia. Escritorios en mal estado, falta de maestros y peligro de deslave es lo que viven 425 estudiantes de la Escuela Oficial Rural Mixta Nuevo Amanecer, ubicada en la colonia Bello Amanecer en la zona 10 de Villa Nueva, a 200 metros del vertedero, cuyos desechos también les afectan; además, las aulas son de madera y tienen capacidad para 25 niños, pero ahora estudian entre 45 y 50, algo que provoca que estas se conviertan en un horno y pese a que hay algunos ventiladores los niños sufren por el calor que les provoca hemorragias nasales o golpes de calor.

Por la tarde este lugar recibe a 125 adolescentes que están en el Instituto de Educación Básica; Sin embargo, aquí solo hay dos maestros y la directora, que también se ocupa de un grado.

Reconocen que no pueden atender adecuadamente porque les faltan maestros. Computación no imparten porque no cuentan con equipo.

Este lugar fue dictaminado en mayo de 2020 por la Conred, como vulnerable por grietas que presenta y peligro de deslave.

Informe de Conred

En el informe de Conred al que Guatevisión y Prensa Libre tuvo acceso se señala “que el establecimiento educativo está emplazado en un terreno dependientes pronunciadas sobre dos plataformas donde se encuentra una diferencia de 1.30 metros, aproximadamente, ubicados sobre un área de relleno colindante a la orilla de la ladera.

Además, el área donde se encuentra ubicado el establecimiento educativo colinda con el predio de vehículos consignados de la Policía Nacional Civil y el verdadero municipal de Villa Nueva AMSA, lo que provoca contaminación en la comunidad Bello Amanecer.

En el informe de ocho páginas de la Conred, emitido el 28 de mayo de 2020, destaca que en el patio del establecimiento se pueden observar fisuras, pudiendo atribuirse a un movimiento lento de masa y el inadecuado manejo de la escorrentía superficial; además, los elementos estructurales de las aulas son un sistema constructivo frágil y la falta de mantenimiento preventivo ponen en riesgo a quienes estudian en el lugar.

Padres de familia aseguran que, a pocos metros del Hospital de Especialidades de Villa Nueva, siempre en el kilómetro 22 de la ruta al Pacífico, existe un lugar que pertenece al Ministerio de Gobernación, adjudicado al Sistema Penitenciario que era donde se buscaba construir una cárcel de máxima seguridad, la cual fue anunciado a mediados de 2016 por Francisco Rivas exministro de Gobernación durante el gobierno de Jimmy Morales.

Añaden que esa propiedad puede ser donada al Ministerio de Educación para que se construya una nueva escuela, pero eso es incierto.

Testimonios

María de Los Ángeles Machic Maldonado, directora de la escuela Nuevo Amanecer, dijo que atienden a 290 estudiantes y “realmente las aulas son insuficientes para atender a toda la población de los alrededores”.

Añadió que desde antes de la pandemia han gestionado que les den soluciones a lo problemas, pero no han recibido respuesta de parte de las autoridades.

“Estos estos salones son aproximadamente para 30 alumnos topaditos, pero nosotros tenemos entre 40 y 48 alumnos por aula. Después de la hora de recreo el calor es excesivo, con proyectos de aula se han puesto ventiladores, pero no son suficientes”, comentó Machic.

La directora recuerda que este año no pudieron aceptar a muchos estudiantes, pues a su criterio la escuela no da para un escritorio más.

Por su parte, la estudiante Scarlett Castillo López dijo que estudiar en la escuela es complicado, debido al calor que hace en las aulas, principalmente cuando se quema basura en el vertedero.

Añadió que esas condiciones les impiden concentrarse, lo que afecta su educción.

Rebeca Marroquín, madre de familia, comentó “las aulas son muy pequeñas y los niños no caben, tenemos muy poco espacio. Los niños sufren de mucho calor, cuando es invierno el sufrimiento que tenemos es porque tenemos a la para a AMSA y es mucho el mal olor que sale de allí”.

ESCRITO POR:

Andrea Domínguez

Periodista de Guatevisión con 9 años de experiencia especializada en historias humanas, comunitarias y política. Premiada como periodista del año en Prensa Libre, Héroes del Cambio, APG y Organizaciones de Mujeres. Becaria de la Agencia Israelí para la Cooperación Internacional.