Ramazzini enfatizó en que los distintos conflictos del país mantienen a una sociedad polarizada que vive enfrentada. “Una de las consecuencias graves del conflicto armado interno fue haber divido aún más a los guatemaltecos que ya estaban divididos por las clases sociales y el racismo”, agregó el Obispo.
El obispo Buezo pidió vivir en paz y armonía entre los seres humanos.
“Es preocupante lo que acontece aquí y en todo el país, en donde la vida humana cuesta muy poco. Todos los días hay muertos por violencia; eso no puede seguir así, porque se está destruyendo la obra de Dios”, expresó.