Estos se bajaron con él del vehículo y lo llevaron hacia un sembradío seco, donde lo atacaron.
Los pobladores del lugar explicaron que escucharon gritos de auxilio, y cuando se acercaron encontraron a la víctima tirada en el suelo, por lo que llamaron a los Bomberos Voluntarios.
Cuando los socorristas llegaron verificaron que la víctima había muerto y tenía múltiples heridas de arma blanca y golpes.
A unos 11 metros de donde quedó el cadáver estaba la llave del picop, que quedó abandonado en el camino.