En la vivienda de Ramírez las autoridades incautaron dos CPU, cuatro cámaras fotográficas y teléfonos celulares. Y según las pesquisas la empleada del OJ filtraba información a los cabecillas de la banda.
Ramírez Ramos es sindicada de los delitos de asociación ilícita, obstrucción a la justicia y conspiración para la asociación ilícita. Mientras que Salcedo Guerrero, se le sindica de comercio y almacenamiento ilícito de drogas, asociación ilícita, tenencia ilegal de armas, tenencia ilegal de municiones.
Los dos capturados fueron trasladados hacia la Torre de Tribunales en la capital, donde deberán rendir su primera declaración.
Según una fuente policial, la detención obedece a que Ramírez interfirió durante la detención de Hugo Alejandro Chacón Cerna, 21, y Rodrigo Orellana Recinos, 43, originarios de Río Hondo, Zacapa, quienes fueron capturados el pasado 20 de noviembre en Estanzuela porque supuestamente proveían de armas, municiones, dinero, vehículos e inmuebles a los Zetas.