El caso está bajo investigación de la Fiscalía de Distrito de Sacatepéquez, la cual reveló algunos detalles sobre cómo la familia se despertó en medio de la madrugada y descubrieron al intruso, que luego se convertiría en el verdugo de Julio.
De acuerdo con el Departamento de Comunicación Social del Ministerio Público (MP), “se procesó una escena del crimen el pasado domingo 19 de febrero durante la madrugada, en una vivienda ubicada en residenciales San Pedro El Alto, aldea San Pedro Las Huertas, Antigua Guatemala”.
La Fiscalía señaló que “producto de este hecho fue ingresado en un centro asistencial el señor Julio Antonio Sical Hernández, en donde posteriormente falleció”.
“De conformidad con las investigaciones preliminares, los propietarios de la vivienda se encontraban durmiendo cuando escucharon ruidos, por lo que Sical Hernández se dispuso a inspeccionar el origen de dichos sonidos, encontrándose con una persona con la cual forcejeó y posteriormente le disparó”, refiere el MP.
Además, la Fiscalía detalló que durante el procesamiento de la escena en la vivienda de Sical “se localizaron diversos indicios que coadyuvarán a fortalecer las investigaciones y se realizaron recorridos, cuyo fin es ubicar cámaras (de videovigilancia) y así obtener videos que permitan identificar al responsable de este hecho”.
Emotivo mensaje
Amigos y vecinos de Antigua Guatemala están consternados por el crimen contra Sical Hernández, quien estaba casado con Andrea Stachnik, quien en sus redes sociales publicó una emotiva carta donde confirmaba el deceso. Ambos procrearon una niña de 8 años, a quien la víctima intentó defender de atracador.
Luego de cuatro días de luchar por su vida y de resistir varias cirugías, el 22 de febrero pasado la esposa de Sical confirmó el deceso en sus redes sociales.
“Perdí al amor de mi vida hoy. Julio falleció pacíficamente esta mañana conmigo y sus padres a su lado. Fue increíblemente fuerte y ganó batalla tras batalla, pero ya no pudo seguir luchando”, escribió en Facebook, Andrea Stachnik, el 22 de febrero a las 11:58 horas.
Agregó que “Julio era mi mejor amigo, mi alma gemela y mi héroe. Murió de la forma en que vivió, valientemente, con todo su yo, protegiendo a nuestra familia”.
La esposa de Sical asegura que “él salvó nuestras vidas, y sé en mi corazón que, si tuviera que hacerlo de nuevo, no cambiaría nada. Sé que estaba en paz en sus últimos momentos sabiendo que Bella (su hija) y yo estamos a salvo e ilesas”.
“Gracias a todos por el amor y el apoyo que habéis derramado sobre nosotros en los últimos días. Me mantuvo en marcha y le mantuvo luchando mucho más tiempo de lo que nadie pensaba posible”, reconoció.
“No hay palabras para expresar lo mucho que esto significa para mí”, concluyó.