Guatemala

Peritos declaran en juicio por masacre de familia

Los informes de balística y foreneses presenetados en el Tribunal "C" de Femicidios arrojaron los primeros datos acerca de cómo murieron tres víctimas de una familia y una cuarta vinculada por la fiscalía al caso.

Eswin Silvestre Pérez Marroquín —izquierda— e Irán Ezequiel Pelén enfrentan debate por varios  crímenes.

Eswin Silvestre Pérez Marroquín —izquierda— e Irán Ezequiel Pelén enfrentan debate por varios crímenes.

CIUDAD DE GUATEMALA – Irán Ezequiel Pelén Santos y Eswin Silvestre Pérez Marroquín, enfrentan juicio por la muerte de cuatro personas y se presume que una quinta podría estar vinculada a la masacre de la familia.

Según explicaron los forenses citados como testigos del Minsiterio Público, Yenifer Fabiola Del Cid García recibió disparos en el parietal izquierdo y el tobillo izquierdo, a Jairon Romero Diéguez le dispararon en el tórax del lado derecho, el muslo izquierdo y el muslo posterior derecho. La herida en el tórax habría sido suficiente para acabar con su vida, consideraron los médicos.

A Lesvia Cecilia García Velásquez -madre de Del Cid García-, le dispararon en el pómulo derecho y el occipital derecho.

En tanto que Lesvia Hernández Tiguilá, otra víctima que murió una semana antes de la masacre ocurrida el 8 de febrero de 2010 y que la físcalía vincula con estas muertes como a la mujer que fue confundida con Del Cid García en un intento previo de asesinarla, recibió disparos en el parietal derecho. 

Del Cid era  esposa de Mayron De León Hernández, alias el Zacapa y según la acusación del MP, habría conspirado para darle muerte. No obstante, él no está procesado por ese delito. El próximo lunes se espera la declaración de testigos.

De León Hernández fue detenido y señalado de ser el líder de once extorsionistas que vivían de los cobros que hacían a una decena de transportistas en cuatro departamentos de occidente.

La Policía calculó que recaudaban unos Q60 mil mensuales. Su centro de operaciones era Amatitlán.

Investigadores sospechan que el Zacapa continuaba con las extorsiones desde el Preventivo. Cuando Del Cid, su quinta conviviente y madre de sus dos hijos, se opuso a continuar con los cobros, su muerte habría sido ordenada desde esa cárcel. No obstante, el móvil de que haya ordenado el crímen no está debidamente probado en la acusación.

El próximo miércoles declararán el resto de peritos del Inacif para explicar cómo muerieron el resto de las víctimas.

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