Guatemala

Mujeres habrían robado dinero de extorsiones

Involucrarse con pandilleros que extorsionan a comerciantes  en  aldeas de Santa Catarina Pinula les habría costado la vida a tres mujeres que, al parecer, cobraban el dinero y se quedaron con parte de este, según sospechan investigadores policiales.

Los cuerpos de las tres  mujeres fueron localizados en una zona boscosa de la aldea El Manzano, Santa Catarina Pinula,  el domingo último. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Los cuerpos de las tres  mujeres fueron localizados en una zona boscosa de la aldea El Manzano, Santa Catarina Pinula,  el domingo último. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Los cuerpos de las  mujeres fueron localizados el pasado domingo, en un sector boscoso de la aldea El Manzano, de ese municipio, con señales de haber sido abusadas.

En el lugar del hallazgo  la Policía localizó  boletas de retiro de dinero,  a nombre de Elsa María Torres, de unos  28 años, quien, se cree, es una de las víctimas.

De acuerdo con las pesquisas  y por lo que se ve en las boletas, cada tres días le depositaban entre Q1 mil y Q3 mil a Torres, lo que hace suponer    que era el dinero de las exacciones a comerciantes de ese municipio, dijeron investigadores.

Agregaron que el grupo delictivo con el que  se sospecha  que colaboraban las féminas opera  en las aldeas El Manzano y  El Pajón, y también en el casco urbano de Santa Catarina Pinula.

Una de las líneas de investigación apunta a que las féminas  se  quedaron con parte del dinero que cobraron durante la semana, informaron las fuentes policiales.

Ese acto habría causado que los jefes de la clica     decidieran   abusar de sus colaboradoras y darles muerte. Hasta ayer, dos cuerpos  seguían en la morgue.

Testigos claves

Dos personas que el sábado por la tarde recogían leña en el lugar donde fueron localizados los cuerpos indicaron  que vieron cuando cuatro individuos bajaban al barranco con las tres  mujeres,  por un   camino estrecho.

Una de ellas, posiblemente la más joven, repetía   que sentía miedo y que era mejor que regresaran, ya que el  lugar era peligroso, relataron.

Los testigos  expusieron que en ese momento no  se imaginaron  que algo malo ocurriría. Pensaron que se trataba de un grupo de parejas que había bajado al barranco como distracción, ya que se veía que las jóvenes  reían y no eran forzadas.

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