Rivas aseguró que en algunos centros carcelarios se rebasa la capacidad de albergar privados de libertad en un 300 por ciento.
“La infraestructura carcelaria data de hace más de 15 años, fue construida para seis mil 500 privados de libertad, pero en la actualidad hay más de 20 mil, por ello es necesario construir nuevos centros”, recordó el ministro, y agregó que se hizo la solicitud a la Unidad de Extinción de Dominio de propiedades que se han extinguido al narcotráfico para realizar allí las edificaciones, uno de estos bienes se encuentra en Escuintla.
Para finales de este año se prevé concluir la construcción de dos centros para mujeres. Según el funcionario, uno albergaría a las privadas de libertad que viven con sus hijos y el otro para las que ya tienen condena. Estos se construirían con el apoyo de la Embajada de Estados Unidos y la Unión Europea, que financian los centros para mujeres. Ambos proyectos tendrían un costo de US$10 millones.
Para el 2017 se espera construir dos cárceles para hombres que guardan prisión preventiva y condena, y una más de máxima seguridad.
