Bertossa dijo que el exdirector de la PNC supuestamente participó en hechos que constituyeron “limpieza social”, y que para eso asesinaron a tres reos que se fugaron de la cárcel el Infiernito, Escuintla, en el 2005, así como a siete miembros del comité de orden y disciplina de la Granja de Rehabilitación Penal Pavón, Fraijanes, en el 2006.
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El juicio contra Sperisen se tramita en aquel país europeo debido a la negativa de las autoridades de esa nación a extraditar al exfuncionario, pues tiene doble nacionalidad, suizo-guatemalteca.
La ley de Suiza dispone no entregar a ninguno de sus ciudadanos a otros países en donde se les persigue penalmente. Además, da competencia a los tribunales de esa nación para juzgar los hechos criminales sindicados contra suizos cometidos fuera de sus fronteras. El juicio contra Sperisen comenzó el pasado 15 de mayo.
El caso
Sperisen permanece preso en la cárcel Champ-Dollon, desde el 31 de agosto del 2012, tras ser investigado por su posible vínculo con una estructura criminal formada por funcionarios del Ministerio de Gobernación.
El Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) cooperaron con la Procuraduría General de Ginebra, a la cual entregaron las pesquisas que efectuaron en Guatemala, referente a los casos el Infiernito y Pavón.
En el primer caso se investigó la supuesta ejecución extrajudicial de tres reos que junto a otros 16 se fugaron de la mencionada prisión.
Para lograr su recaptura, las autoridades pusieron en marcha el plan Gavilán.
El segundo caso se refiere a la muerte de siete reos de Pavón, durante el plan Pavo Real, el cual fue desarrollado para retomar el control de ese centro penitenciario.
Ambos expedientes estuvieron archivados durante varios años, hasta que el MP y la Cicig solicitaron su reapertura.
En 2010, el Juzgado de Mayor Riesgo, a cargo de la jueza Carol Flores, ordenó retomar las investigaciones por los dos casos.
El 23 de mayo del 2013, el Tribunal B de Mayor Riesgo condenó a tres policías y a un civil por el caso Pavón. Otros cuatro procesados fueron absueltos por falta de pruebas.
