Según la publicación, el sindicado del triple homicidio debía presentarse ayer a la Corte, para atender una audiencia de extradición. Su aprehensión se concretó tras haberse seguido la pista de varias llamadas que hizo de su celular a México, la noche del domingo.
Las autoridades indicaron que Mejía Ramos tenía heridas con arma blanca que parecían autoinfligidas, se lee en la página de internet.
El hallazgo
A eso de las 19.07 horas del domingo, un niño de 12 años, primo de las víctimas, encontró los tres cadáveres.
El pequeño quería saber si podía jugar con las niñas, quienes no salían de su habitación, en el apartamento que compartía García Alvarado con su tío y primos.
Al entrar en el cuarto, el niño vio a su prima en el suelo, en un charco de sangre, por lo que corrió a avisarle a su padre, Romeo Chuc, 37.
“No entiendo qué pasó”, dijo consternado Chuc al NY Daily News. El hombre halló a las niñas, una junto a la otra, sobre la cama, cubiertas con una manta.
Indicó a la Policía que la última vez que vieron con vida a su sobrina fue el sábado recién pasado, a las 21 horas, en el apartamento, situado en Sutphin Boulevard.
En el lugar del crimen, las autoridades hallaron cinco cuchillos que pudieron haber sido utilizados para matar a las víctimas, quienes fueron heridas varias veces en el pecho.
La noche del lunes, amigos y vecinos de García Alvarado les rindieron un homenaje póstumo. Su familia en Guatemala espera la repatriación de los cuerpos y exige justicia.
“Le dije que lo dejara”
Luz Mina, madre de Deysi García, dijo al NY Daily News que le había advertido a su hija de que dejara al marido, quien la violentaba.
“No hay palabras que puedan explicar el dolor que estoy pasando”, dijo Mina. “Yo siempre le dije que lo dejara. Pero ella decía ‘No puedo, porque tengo dos hijas, y él —Miguel Mejía Ramos— está llevando el dinero a casa'”, añadió.
Mejía Ramos tenía antecedentes por violencia doméstica, pero nunca fue arrestado. Una denuncia del 30 de mayo y otra del 13 de noviembre, ambas fechas del año pasado, alertaron sobre los abusos físicos que le infligía a su esposa.
Además, fue detenido una vez por conducir con licencia suspendida, y en otra ocasión fue citado a comparecer por haber bebido licor de una botella descubierta —en Estados Unidos es prohibido exhibir esos productos—.
INTENTABA ESCAPAR
Miguel Mejía Ramos, capturado por la muerte de su esposa e hijas en el barrio Jamaica, Queens, Nueva York, conducía una camionetilla blanca 2001, por la autopista entre Austin y Houston, Texas. Se informó que también utilizaba el nombre de Álex Jiménez. Las autoridades sospechan que intentaba tomar un vuelo a México. Familiares de las tres víctimas, que residen en Totonicapán, pidieron justicia, y esperan la repatriación de los cuerpos.