En esa patrulla testigos presenciaron que se trasladaba al guatemalteco Julio Fernando Cardona Agustín, de 19 años, antes de ser encontrado muerto, añadió.
Los policías fueron encarcelados el 18 de agosto para que un juez determine su situación jurídica, prosiguió.
Los testigos, en su mayoría migrantes de El Salvador, Honduras y Guatemala, coinciden en entrevistas separadas que el día del crimen acudieron a un parque ubicado cerca de la casa refugio San Juan Diego cuando escucharon gritos del joven y vieron cómo era golpeado en repetidas ocasiones por tres policías.
El fiscal dijo que se continúa rastreando al tercer policía que habría presuntamente participado en la agresión.
Otros testigos, incluyendo el director del albergue, dijeron a la prensa que los policías entregaron al guatemalteco a un grupo de ciudadanos exaltados porque habían sufrido un robo.
Unos 140 mil migrantes, principalmente centroamericanos, cruzan México todos los años para llegar a Estados Unidos, aunque varias ONG los cifran en más de 400 mil y denuncian que miles son asaltados, sometidos a abusos y secuestrados con complicidad de las autoridades.