No obstante, la CC rechazó la acción con el argumento de que las condiciones socioeconómicas de los guatemaltecos que radican en aquel país son distintas a los que viven en Guatemala.
“Conguate repudia la actitud de la CC quien claramente le da la espalda a los migrantes, demostrando con esta acción que nuestras instituciones están en contra del migrante, nos ven como un negocio y se evidencia la podredumbre y la corrupción que se ha enquistado en el sistema de justicia”, expuso Carlos Calderón, presidente de la Coalición Nacional de Inmigrantes Guatemaltecos (Conguate).
Calderón añadió: “Los migrantes no vivimos en situación de ventaja económica, a los magistrados de la CC, se les olvido que los migrantes vienen a los Estados Unidos a trabajar para mantener a sus familias y pagar las deudas que generan para pagar su travesía”.
Byron Quezada, de la Fraternidad Shecana en Los Ángeles, indicó que la resolución muestra la discriminación que las instituciones hacen de los migrantes. “”Para ellos no somos igual, por lo mismo, nos tratan como ciudadanos de segunda clase, sin derechos constitucionales ni representación ante las corte”, afirmó Quezada.
Añadió que “no nos queda más que aceptar el chantaje y pagar lo que nos piden, en dólares, que no es la moneda nacional de Guatemala”.
Según el líder migrante, con la resolución los magistrados de la CC “violaron la Carta Magna que dicta que la ciudadanía no la puede perder el ciudadano nacido en el país”.
