El nuncio hizo la lectura de la carta, fechada el 11 de julio, en la apertura de un coloquio organizado por México y el Vaticano para tratar el fenómeno de la migración internacional y el desarrollo, al que asiste el secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolin.
En su mensaje, Francisco se refirió a las amenazas que padecen los migrantes en el mundo pero incidió en los peligros que afrontan los niños que, cada vez más, viajan solos desde Centroamérica y México a Estados Unidos.
“Esta es una categoría de migrantes que desde Centroamérica y desde el mismo México cruzan la frontera con los Estados Unidos en condiciones extremas y persiguiendo una esperanza que la mayor parte de las veces resulta vana“, dijo Francisco.
El Pontífice reclamó la “atención de la comunidad internacional ante este desafío” y medidas de los países involucrados.
Se requieren “políticas informativas sobre los peligros del viaje y de promoción al desarrollo de sus países de origen“, pidió.
Desde el pasado octubre fueron interceptados en la frontera sur de Estados Unidos unos 57 mil menores de edad que ingresaron al país clandestinamente y sin la compañía de adultos.
Este fenómeno ha llevado al gobierno estadounidense a analizar medidas de emergencia y a pedir al Congreso un paquete especial de tres mil 700 millones de dólares para atender a la situación fronteriza.