“Uno de los accidentes más recurrentes es cuando las amas de casa dejan  los agarradores de las ollas fuera de la hornilla de la estufa, y los niños, por curiosos, saltan para alcanzarla y se vierten aceite o agua caliente”, refirió  William González, vocero de los Bomberos Voluntarios.

El socorrista indicó que en la mayoría de casos  la familia del menor es de escasos recursos y los incidentes ocurren a cualquier hora del día.

En la provincia

Los Bomberos Voluntarios han determinado que el 80 por ciento de   casos de niños quemados por fuego directo o líquidos suceden en la provincia.

El socorrista Sergio  Vásquez aseveró que muchos de estos sucesos   ocurren cuando los niños, especialmente  los  que empiezan a caminar, caen accidentalmente en  algún comal o en las brasas  que las familias  juntan en el suelo para preparar  alimentos.

“Caen en la leña encendida o bien,  por su inocencia, agarran las brasas  y se provocan serias quemaduras   en las manos “, refirió.

En la capital, los Bomberos Municipales trasladan al mes entre seis y ocho menores quemados.

“Esto se debe  a la falta de atención que se le da al niño mientras juega”, dijo el bombero Raúl Hernández.

Víctimas mortales

Del  2000 al 2015, según registros de los bomberos, 11 niños, de 9 meses a 8 años  han perdido la vida en incendios.

Los casos se han registrado en  Taxisco, Santa Rosa; Petén y Chiquimula,  y en la capital, en el asentamiento Independencia, zona 18 y  La Verbena, zona 7.

Hernández afirmó que en algunos  de estos incidentes  los niños murieron antes de ser alcanzados por el fuego, debido a que se intoxicaron   con el humo.

Rony Véliz, portavoz del Hospital General San Juan de Dios, indicó  que actualmente cinco niños de entre  3 y 12 años  reciben tratamiento por quemaduras causadas por líquidos calientes. Otros casos se deben a que introdujeron objetos en  tomacorrientes.

Lourdes Santizo, pediatra del Hospital Roosevelt, informó que en enero último  atendieron 32 niños quemados  en diferentes situaciones, y este mes  reciben tratamiento 12.

El 9 de febrero, 9 niños se salvaron de morir en un siniestro en la zona 1.