El capturado fue puesto a disposición del Juzgado de Paz local y luego trasladado hacia la cárcel Los Jocotes.
Según las pesquisas, en un operativo le marcaron el alto al motorista Carlos Linares, quien al presentar sus papeles se evidenció que estaba solvente, pero su acompañante de apellido Carranza tenía una orden de captura pendiente por el delito de homicidio.
La orden de aprehensión fue girada por el Juzgado de Primera Instancia Penal de Chiquimula con fecha 18 de febrero del 2004.