Todos los días, 20 mil mujeres menores de 18 años dan a luz en países subdesarrollados, según señala el informe Maternidad en la niñez, de la División de Información y Relaciones Externas del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), lo cual constituye un problema serio para el desarrollo humano.
“Guatemala sigue siendo un país con datos alarmantes. Por ejemplo, en el 2012 hubo 244 adolescentes de 19 años que ya tenían cuatro hijos. Eso hace pensar en el rostro y realidades de estas jóvenes que ven truncados sus sueños de sobresalir y cumplir sus metas por problemas que afectan al país en general”, señala Ana Luisa Rivas, representante auxiliar de Unfpa.
Las cifras de estos embarazos van en ascenso. “La tendencia en Guatemala es que un 20 o 22 por ciento de los partos se da en menores de 19 años. En el 2013 hubo más de 60 mil embarazos en adolescentes de entre 15 y 19 años, y en los primeros cuatro meses de este año ya hay registrados 18 mil 515 partos en estas edades, lo cual es un riesgo de salud”, explica Mirna Montenegro, secretaria del Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva (Osar).
Las mujeres menores de 19 años tienen un riesgo cuatro veces mayor de morir durante el embarazo o parto que aquellas jóvenes mayores de 20 años, ya que estas no cuentan con las condiciones físicas o se encuentran en situación precaria de servicios de salud.
Aunque la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud establece que la mortalidad materna se ha reducido en el país un 49 por ciento —del 2000 a la fecha ha bajado de 153 a 140 muertes por cada 100 mil recién nacidos—, no se cumplirá con el Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir los casos hasta 75 por cada 100 mil.
“Lo ideal sería bajar un 5.8 por ciento anualmente, y estamos bajando un 2.8 por ciento”, explica Rivas.
Desigualdad
Las expertas señalan que además de la amplia desigualdad que ha existido entre hombres y mujeres a lo largo de los años, en donde predomina la cultura patriarcal, la falta de equidad y desigualdad de oportunidades, en donde las féminas incluso ganan mucho menos ejecutando el mismo trabajo que los hombres, la situación de la maternidad temprana también se desencadena de otros factores como la pobreza, acceso nulo a servicios básicos como los de salud, falta de formación, ausencia de educación integral en sexualidad y violencia sexual, entre otros factores.
Cabezas de hogar
A criterio del sociólogo Hans Quevedo, las madres guatemaltecas también se enfrentan a otras realidades que hacen más difícil su crecimiento humano, social y profesional. “Muchas de ellas son estigmatizadas y marginadas, y otras hasta llegan a ser abandonadas por su pareja, lo cual las obliga a convertirse en motor laboral, además de ser amas de casa, o deben dejar a sus hijos para emigrar a países como Estados Unidos”, comenta.
En ese sentido, vale la pena mencionar que 19 por ciento, casi una de cada cinco madres, se han convertido en jefas de hogar, que día con día luchan por sobresalir, en un mundo desigual en donde ganan en promedio Q2,400, que no es suficiente para mantener a sus hijos, cuatro en promedio.