corrupción en guatemala

Bernardo Arévalo presenta la comisión con la que busca frenar la corrupción

Presidente Bernardo Arévalo presenta a funcionarios que integrarán la Comisión Nacional contra la Corrupción y a integrantes de varios sectores que serán consejeros.

El presidente Bernardo Arévalo -séptimo por la izquieda- presenta a la Comisión Nacional contra la Corrupción. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)

El presidente Bernardo Arévalo -séptimo por la izquieda- presenta a la Comisión Nacional contra la Corrupción. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)

El Gobierno de Guatemala presentó este 28 de febrero a los integrantes de la Comisión Nacional contra la corrupción, que será dirigida por Santiago Palomo, y también a un grupo de personas de la sociedad civil organizada, autoridades indígenas, académicos y sector privado que fungirán como consejeros de la mencionada comisión.

La presentación se llevó a cabo en el Palacio Nacional de la Cultura, en un acto que estuvo presidido por el mandatario Bernardo Arévalo y la vicepresidenta Karin Herrera.

Arévalo fue el que presentó a los funcionarios del Organismo Ejecutivo que integrarán la aludida comisión y que acompañarán a Palomo.

La comisión quedó integrada así:

  • Santiago Palomo, director
  • Jonathan Mencos, ministro de Finanzas Públicas.
  • Juan Gerardo Guerrero, secretario general de la Presidencia de la República.
  • Claudia Palencia, viceministra de Gobernación
  • Carlos Mendoza, secretario de Planificación y Programación de la Presidencia.
  • Carla Gómez, directora la Oficina Nacional del Servicio Civil
  • Eddiey Cux, director de la Comisión de Gobierno Abierto y Electrónico.

Consejeros delegados

Además, el presidente Arévalo informó sobre la instancia de consejeros delegados, un cuerpo de notables que de forma voluntaria y cívica se pone al servicio del país.

“Esta instancia tendrá la responsabilidad de aportar las propuestas que surjan desde la sociedad para producir futuras reformas institucionales y legislativas en materia anticorrupción. Los consejeros delegados elegidos por este Gobierno representan a tres grandes sectores de la ciudadanía:  a la sociedad civil organizada, incluyendo las instituciones académicas; a los pueblos indígenas, pilares de la defensa de la democracia y el sector privado, también llamado a liderar este cambio cultural en Guatemala”, comentó Arévalo.

Las personas que integran este grupo de consejeros son:

  • *Javier Montenegro
  • Connie de Paiz
  • Mariana Rohrmoser
  • Daniel Haering
  • Saturnino Figueroa Pérez
  • Ana Alicia Alvarado Batz.

No toleran la corrupción

Arévalo afirmó, durante su discurso: “Este gobierno no tolera la corrupción, durante muchos años los guatemaltecos y guatemaltecas fuimos testigos de cómo la corrupción se robaba el dinero que estaba destinado a proveer servicios básicos a la población del país. Vimos cómo la corrupción destruyó las estructuras del servicio civil del Estado, usando las plazas de trabajo como botín para el pago de favores del gobierno de turno y no como el mecanismo mediante el cual se entregan los servicios que el pueblo de Guatemala necesita”

Refirió: “Nos indignamos al saber que con los impuestos que paga toda la ciudadanía, en el contexto de un pueblo que vive en condiciones de pobreza todavía en su mayoría, iban a las manos de los liderazgos políticos para enriquecerse ellos, sus familias, sus camarillas o para usarlos en las elecciones y de esa manera mantener vivo el sistema de cooptación corrupta del Estado”.

Agregó que estas personas, sin ningún escrúpulo, usaron el dinero de la gente pobre para llevar los corruptos al poder, para enriquecerse a costa de la educación, de la salud, de la vida y desarrollo del pueblo.

Afirmó que el pueblo decidió ponerle un alto a este ciclo vicioso y eligió a este gobierno y con ello rompió la espiral  de corrupción que “alimentaba un sistema podrido establecido a costa del bienestar del pueblo de Guatemala.

Arévalo dijo que cuando asumieron el reto de gobernar el país, lo hicieron sabiendo que su prioridad número uno era “cerrar el chorro de los recursos públicos a los corruptos”.

Añadió que además, es su responsabilidad ser el parteaguas de un cambio que logre erradicar la corrupción de la cultura institucional y colectiva del país para generar un cambio sistémico sostenible.

“Este gobierno no tolera la corrupción, Guatemala no puede volver a tolerar la corrupción. Queremos cambiar la historia, queremos que Guatemala sea reconocido como un país de oportunidades, un país de gente decente y trabajadora, y que nunca más su imagen sea oscurecida por unos pocos liderazgos corruptos que no merecen estar en nuestra memoria. Este gobierno no tolera la corrupción y el pueblo de Guatemala no tolera la corrupción”, mencionó.

Buscan rescatar instituciones

Expresó que parte de su misión es rescatar las instituciones y los buenos liderazgos que todavía existen en ellas, y que “aún a pesar de este remolino de la corrupción, continúan trabajando para servir a la gente y no para servirse de ella”.

“Nuestra misión pasa por sanar y fortalecer esos liderazgos para que dejen de estar en la resistencia y pasen a liderar junto con nosotros el cambio que la gente le exige al Gobierno. Un cambio histórico que todas y todos los guatemaltecos decentes podemos impulsar”, refirió Arévalo.

Según el mandatario, la nueva Comisión Nacional contra la Corrupción no será más una forma de anestesia para adormecer el clamor del cambio que exigen los guatemaltecos, sino que actuará para prevenir y erradicar las prácticas corruptas de las instituciones y devolverlas al cauce que deben tener, el cauce del bienestar de la gente.

Puntualizó que Santiago Palomo es un profesional joven y dinámico, comprometido con un país diferente, dispuesto a poner su profesionalismo, su integridad y su capacidad al servicio de la Comisión Nacional contra de la Corrupción y su causa.

“Hoy damos un nuevo paso adelante en el cumplimiento de nuestros propósitos como gobierno, y damos un nuevo paso adelante en la lucha de Guatemala por librarse de las ataduras de la corrupción. Damos un paso adelante en favor de los intereses del pueblo de Guatemala. Damos un paso adelante para lograr liberar a nuestro país, a nuestras instituciones, de las ataduras de la corrupción que han impedido el desarrollo y que han mantenido a tantos y a tantas de nuestros hermanas y hermanos en condiciones de pobreza. Damos un paso hoy en firme para irle ganando el terreno a los corruptos, porque así, combatiendo la corrupción, Guatemala va a salir adelante”, concluyó Arévalo.

Es un reto

Por su parte, Santiago Palomo, director ejecutivo de la Comisión Nacional contra la Corrupción dijo que este es el reto más grande de su carrera profesional y coordinar el urgente esfuerzo que el presidente dirigirá por recuperar la confianza en las instituciones públicas y devolver al gobierno su verdadera razón de ser.

“Debemos ser claros, la corrupción hasta antes de este gobierno, había sido la regla en la vida política del país. Guatemala ocupa un crítico y penoso 154  lugar de 180 en el ranking de corrupción de Transparencia Internacional”, mencionó Palomo en su discurso.

Recordó que en los últimos años, el pueblo de Guatemala ha sido testigo de un prolongado patrón de deterioro institucional a raíz de “las actitudes descaradas de nuestros gobernantes que, en lugar de trabajar por el bien común y su desarrollo pleno, han convertido al estado en su principal botín político y económico”.

“Gobierno tras gobierno, los guatemaltecos tristemente hemos tenido que presenciar una horda de funcionarios públicos que salen del gobierno con cada vez más elevados e inexplicables patrimonios, producto de negocios opacos y corruptos, mientras los servicios públicos esenciales siguen siendo víctima de condiciones cada vez más precarias”, comentó

Dijo que ahora el país se encuentra al frente de una oportunidad histórica, una oportunidad que nace del clamor del pueblo de Guatemala que ya no quiere más corrupción.

Palmo expresó que con esta comisión se pueden cimentar las bases de un proyecto integral en materia de lucha contra la corrupción y emprender un esfuerzo institucional profundo por poner en marcha medidas para prevenir la corrupción en el gobierno.

“Más allá de detectar y perseguir estos focos de corrupción, que se hará fomentando los adecuados mecanismos en cada institución del Ejecutivo, es fundamental el desarrollo e implementación de políticas públicas con base en evidencia que tiendan a evitar que estas redes de criminalidad sigan operando y propagándose en el Estado en perjuicio del pueblo de Guatemala”, mencionó.

Puntualizó que desde la Comisión Nacional contra la Corrupción se podrá coordinar y acompañar la implementación efectiva de ese esfuerzo en materia de prevención, denuncia e identificación de patrones de corrupción que les permitan implementar las reformas institucionales y proponer las reformas legales para que dichos actos de corrupción nunca vuelvan a suceder.

Hizo un llamado a los distintos sectores sociales para que presente sus propuestas y que dialoguen con ellos para que juntos puedan estructurar una agenda legislativa e institucional que cimente las políticas anticorrupción que luego se implementarán.

No es comisión de investigación

Palomo recalcó que, a diferencia de las anteriores comisiones, esta nueva comisión no es un ente con mandato de investigación.

“Respetamos las funciones que constitucionalmente han sido delegadas a otras instancias del Estado. La comisión tampoco será utilizada para el chantaje ni para el combate selectivo de la corrupción, sino todo lo contrario, con el apoyo de la instancia de consejeros delegados, seremos un espacio independiente y objetivo donde coordinaremos con otros poderes del Estado. El Legislativo y el Judicial tienen papeles que no pueden ser sustituidos por el Ejecutivo” refirió Palomo.

Mencionó que la aludida comisión acompañará el esfuerzo del del gobierno dando seguimiento a los compromisos y evaluando los resultados de las políticas de transparencia, rendición de cuentas y prevención de la corrupción que se decidan implementar.

ESCRITO POR:

Julio Román

Periodista de Prensa Libre especializado en política, seguridad y justicia con más de 20 años de experiencia.