Según el referido sitio, el Ministerio más beneficiado fue el de Comunicaciones, con Q279.7 millones (45.6%) de las transferencias, y el de Desarrollo Social, con Q146.4 millones (23.9%), pese a que esta cartera se coronó por tener la menor ejecución presupuestaria durante el año que recién culminó.
Los ministerios que se vieron afectados fueron el de Gobernación, al que le restaron Q174.5 millones, de los Q4 mil 428.7 millones que le fueron asignados, pese a que el Partido Patriota prometió que privilegiaría la seguridad ciudadana.
Otra partida que sufrió modificaciones fue la de secretarías y otras dependencias del Ejecutivo, a la cual le restaron Q154.3 millones de los Q2 mil 123.5 millones asignados. En tercer lugar quedó Educación, luego de que le quitaran Q101 millones.
Opacas
Aunque Nineth Montenegro, diputada de Encuentro por Guatemala, reconoció que las transferencias están permitidas en la ley, afirmó que el problema es la opacidad con la que se realizan: “No hay forma de darle seguimiento de cuáles son los programas o proyectos que son perjudicados, y cuáles son los que resultan beneficiados”.
La legisladora también lamentó el constante uso de las transferencias presupuestarias, y recordó que para este año se prevén decenas de modificaciones al presupuesto, debido a que no fue aprobado en el Congreso, lo que permitirá una gran discreción al Ejecutivo sobre el destino de los fondos, “será más difícil fiscalizar”, afirmó.
Carlos González, economista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, afirmó que un presupuesto no debe ser tan rígido, y sí pueden hacerse modificaciones, pero recomendó que se hagan de manera transparente, pues “para hacer los cambios, los jefes de los ministerios a los que se les resta también deben estar de acuerdo”.
Algunos cambios
Ejecutivo cambió el presupuesto asignado.
Las transferencias se iniciaron en marzo, cuando se le restó Q25.9 millones a las secretarías y se le sumaron esos recursos a la Presidencia.
La única partida que no sufrió modificaciones fue la del pago de deuda pública, a la que le asignaron Q8 mil 934 millones.
Salud fue la tercera dependencia que más recibió recursos, pues se le sumaron Q96.1 millones a los Q5 mil 111.6 millones que les asignaron.
Aunque el Ministerio de Energía y Minas fue la dependencia a la que menos fondos se le asignaron en el 2013, con Q126.1 millones, se le restaron Q8.8 millones, aún así, ejecutó un 91% de los recursos que le quedaron.
Trabajo fue la que más ejecutó, pero le debitaron Q44.7 millones en el año.