Sin embargo, a finales del 2011, el Congreso de EE. UU. comunicó al gobierno guatemalteco que consideraría en el 2013 la solicitud de levantar el embargo militar de 1977 a cambio de que el país cumpliera seis requisitos.
La nota oficial explicaba que en el 2013 se discutiría la petición de Guatemala si el Ejército tiene “una misión definida”, si se coopera con la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) y si se divulgan todos los archivos militares relacionados con el conflicto armado interno.
También se pidió respetar los derechos humanos y cooperar “con las investigaciones civiles y el enjuiciamiento de los casos de oficiales activos y jubilados –de baja-“.
“Para diciembre último no estaban contemplados esos requisitos, ni el de adopciones ni el de Chixoy, sino que el comité hizo un adéndum en donde colocó los dos últimos requerimientos y restricciones”, refirió el presidente ayer.
Reiteró que todo tiene un fondo “puramente político” en el que se involucra a Tim Rieser, asesor del senador Patrick Leahy.