El informe mide el tamaño de la brecha de desigualdad de género en cuatro áreas: las cuales son participación económica y oportunidad: salarios, participación y empleo altamente capacitado. Educación: acceso a niveles de educación básicos y más elevados. Participación política: representación en las estructuras de toma de decisiones y Salud y supervivencia donde se mide la expectativa de vida y proporción hombres-mujeres.
“Guatemala mejoró veinticinco posiciones en el Índice, ubicándose en la posición 89 de 142 países evaluados, siendo reconocido como el país de mayor avance en todo el informe. Sin embargo aún se mantiene en las últimas posiciones entre los países de la región Latinoamericana y del Caribe, superando sólo a países árabes y de África, principalmente debido a la desigualdad que existe en aspectos educativos entre niñas y niños, bajo empoderamiento político hacia las mujeres y una reducida participación de la mujer en el ámbito laboral”, subrayó Juan Carlos Zapata, Director Ejecutivo de Fundesa.
Es importante resaltar que Guatemala fue el país que a nivel latinoamericano subió más posiciones tanto en el índice global como en el subíndice de participación y oportunidades económicas. También mejoró significativamente en el índice de participación política, al subir 45 posiciones en el índice y 87 posiciones en el subíndice de participación de mujeres en cargos ejecutivos dentro del gobierno, de acuerdo con el comunicado de prensa de esa entidad.
Se evalúa el buen uso y asignación de los recursos y oportunidades entre la población femenina y masculina de cada país, independientemente de los niveles generales de dichos recursos. Las puntuaciones recogidas pueden interpretarse como el porcentaje en el que se han reducido las desigualdades entre mujeres y hombres.
Islandia, Finlandia y Noruega encabezan el listado de las naciones con menor brecha de género en el mundo, mientras que en latinoamérica Nicaragua, Cuba y Ecuador lideran el ranking publicado por el Foro Económico Mundial.