“Aquel fideicomiso que únicamente lo usan para no rendir cuentas a la Contraloría es un flagelo que pudimos detectar y aún queda en la mesa para seguir discutiendo que no deben existir”, afirmó.
Indicó que identificó más de 200 fideicomisos que no se pueden fiscalizar, lo cual será un gran reto para el nuevo titular de la Contraloría.
Otra debilidad de la CGC es el poco presupuesto, afirmó, después de haber firmado el acta con la cual traspasó el cargo a Héctor Santizo, subcontralor de Probidad, quien asumió interinamente la dirección de la institución mientras el Congreso designa a su sustituto.
Continúa proceso
Los 22 candidatos finalistas que aspiran a dirigir la CGC se sometieron ayer a las pruebas psicométricas, en las instalaciones de la Universidad Mesoamericana, zona 8.
Las 364 preguntas que debieron responder los aspirantes intentan explorar el concepto que cada uno tiene de sí mismo, capacidades para resolver conflictos, niveles de independencia, liderazgo y sus reacciones en diversas situaciones en el entorno familiar y de trabajo.
Para el próximo jueves la Comisión conocerá los señalamientos en contra de los candidatos que fueran presentados. Un días antes vence el plazo para presentar las objeciones.