Pérez Molina afirmó que los esfuerzos por reducir la violencia, disminuir la desnutrición y promover empleo se ven vulnerados por el flagelo del narcotráfico, ya que el Gobierno guatemalteco se ve obligado a destinar escasos recursos en el combate de los grupos criminales.
Durante el discurso hizo hincapié respecto a que 50 años han sido suficientes para evaluar los resultados de la política global de drogas, por lo que propone que se establezca un grupo de países amigos que promueva los foros apropiados para la evaluación de los objetivos y de la rigurosa política actual, pero que a su vez lleve alternativas creativas e innovadoras.
El presidente aclaró que no se trata de abandonar la lucha contra el narcotráfico, por el contrario busca responder de forma más integral y efectiva, ya que “los mercados de consumo se expanden en vez de disminuirse, las rutas del comercio y tráfico tienen a diversificarse, el problema de las drogas es cada vez más grande y complejo, involucra a más países y más personas”.
El mandatario comprometió su liderazgo en hacer avance de la evaluación de la política actual de drogas para que sea más efectiva y confirmó que Guatemala esperará a que la comunidad internacional progrese hacia un nuevo consenso, antes de cambiar las políticas del país.
Condena violencia
Ante los acontecimientos registrados en las últimas semanas, Pérez Molina reiteró su rechazo a todo acto de difamación de religiones y condenó la violencia en todas sus expresiones, incluyendo las violaciones a las sedes diplomáticas, pues, dijo, ambas son muestras de intolerancia.
13 Baktún
El mandatario invitó a los jefes de Estados a participar en el cambio de era maya que se celebrará este 21 de diciembre en el parque arqueológico Tikal. Señaló que el evento marca el inicio de una era positiva para renovar energías físicas y espirituales en ambiente de cooperación.