El escándalo de corrupción, destapado el pasado 16 de abril por la Fiscalía y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, provocó la indignación de miles de guatemaltecos que han protagonizado manifestaciones masivas.
Antes de conocerse la renuncia, ya se había convocado a una nueva protesta para este sábado.
“El Congreso puede aceptar o no la renuncia de la vicepresidenta de la República (…), y de aceptarse la renuncia y luego notificada, ella (Baldetti) quedaría fuera del cargo” , agregó el congresista del partido opositor Libertad Democrática Renovada.
El presidente, Otto Pérez, anunció ayer que Baldetti decidió abandonar el puesto y perder su inmunidad para colaborar en la investigación contra una estructura que defraudaba al fisco, dirigida por el exsecretario privado de la vicepresidencia Juan Carlos Monzón, ahora prófugo.
La dimisión ocurrió dos días después de que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) le pidiera al Congreso analizar si le retiraba la inmunidad para procesarla por su eventual responsabilidad en el caso de corrupción.
La CSJ dio luz verde al trámite del antejuicio al indicar que habían “indicios” de una vinculación de Baldetti con la red por menciones como “La R” , “La 2” y “La Señora” en intervenciones telefónicas entre los supuestos integrantes de la estructura.
La vicepresidenta intentó frenar ese proceso interponiendo un amparo ante la Corte de Constitucionalidad, al asegurar que fueron vulnerados sus derechos de presunción de inocencia, entre otros, pero el recurso fue rechazado.
En la carta de renuncia de Baldetti, que fue divulgada por el Congreso, la funcionaria indicó que dimitía “con el fin único de colaborar con todas las investigaciones”.
Luego de que el Congreso ratifique la renuncia, Pérez tendrá unos días para enviar una nómina de tres candidatos a fin de que ese organismo determine quién sustituirá a Baldetti.
