José Castillo, propietario del inmueble estimó las pérdidas en unos Q 3 millones, porque todo lo que ahí almacenaban se perdió.
Castillo dijo que el incendio fue provocado por un juego pirotécnico que vecinos quemaron a la medianoche del 24 y que inició donde tenían almacenados sillones fabricados con esponja para buses.
Bomberos trabajaron por unas cuatro horas para poder controlar el incendio; Carlos Coc, vocero de Bomberos Voluntarios de Antigua, afirmó que utilizaron unos 6 mil galones de agua para sofocar las llamas, y fue necesario movilizar unidades contra incendios de la capital para poder controlar el siniestro.