Dania Monterroso dijo: “Mi esposo tenía ocho años de laborar en la PNC, y estaba de descanso, y no me explico por qué lo mataron, pues jamás me dijo si había recibido amenazas”. Agregó que el picop era de su esposo, y que este y su hermano se llevaban bien.
Según Selfin Ramírez, tío de las víctimas, Mario René laboraba desde hacía cuatro años como guardia de seguridad ejecutiva del Instituto Nacional de Electrificación, y que también estaba de descanso.
En otro hecho, en el km 84.5 de la ruta Interamericana, en Llano Grande, San José Acatempa, Jutiapa, murió baleado Alan Ariel Pineda Pérez, 29, quien conducía el microbús placas C-873BHL.
Según las autoridades, la víctima se dirigía a esta aldea a recoger a su ayudante, ya que prestaba servicio de transporte desde San José Acatempa hasta la academia de la PNC en la zona 6 de la capital.
Comerciante
Aparte, el cadáver de Mónica Zulema Hernández Morales, 27, fue hallado entre cañaverales, en el km 103 de la Ruta Nacional 14, entre Escuintla y Sacatepéquez.
Hilda Esperanza Morales, madre de la víctima, indicó que su hija tenía un puesto de venta de jugo de naranja en la terminal del sur en la ciudad de Escuintla, y que desconocía las causas de su muerte.
En otro crimen, el campesino Rudy Mario de León Ramírez, 48, pereció baleado cerca de la Escuela Oficial Rural Mixta de la aldea Juárez, Génova, Quetzaltenango.