El gobierno estadounidense hizo públicas 1.078 páginas de documentos recientemente desclasificados que hacen referencia a la política de EE.UU. en relación con la Junta militar que gobernó el país sudamericano entre 1976 y 1983.
BBC NEWS MUNDO
Qué revelan los documentos que acaba de desclasificar EE.UU. sobre el régimen militar de Argentina
El gobierno de Argentina calificó como "una ayuda importante" para los juicios por violaciones a los derechos humanos la desclasificación realizada por Estados Unidos de archivos relacionados con el régimen militar argentino.
Los documentos revelan detalles de un encuentro entre el jefe de la Junta militar, Jorge Videla, y el entonces presidente de EE.UU., Jimmy Carter. GETTY IMAGES
Según la prensa argentina, los archivos que confirman el accionar represivo ilegal del gobierno de facto.
Además arrojan luz sobre el rol de EE.UU. en el denominado Plan Cóndor, la operación conjunta de los regímenes militares del Cono Sur para secuestrar, torturar y eliminar opositores políticos en las décadas de los 70 y 80.
“Es un material que viene seguramente a confirmar mucho de lo que ya se fue diciendo en juicios y testimonios“, declaró este lunes el secretario de Derechos Humanos de Argentina, Claudio Avruj, en una conferencia de prensa ofrecida en la sede del Ejecutivo argentino.
“Apuesto a que va a traer ayuda importante a los juicios, va a traer calma también a muchas familias. Quizás no por la novedad, quizás por la ratificación de hechos”, añadió Avruj.
Dilema del gobierno de Carter
Los documentos publicados, que se centran en los años 1977-1980, corresponden en su mayoría a la presidencia de Jimmy Carter en EE.UU.
Los papeles revelan una tensión interna casi constante entre la necesidad de Carter de presentarse como defensor de los derechos humanos en su política exterior y la preocupación de que un corte de la ayuda y del comercio con la Junta argentina fuera contraproducente e hiciera que Argentina se acercara a la entonces Unión Soviética.
“Cuando tomamos medidas hacia Argentina que se interpretan como una sanción, no sólo indignamos a las ideologías de derecha, también ponemos nerviosos al sector empresarial y los medios en EE.UU.“, escribió Zbigniew Brzezinski, consejero de seguridad nacional de Carter, en un memorando de marzo de 1979 a quien fuera secretario de Estado estadounidense, Cyrus Vance.
Los documentos reflejan que, en 1977, primer año de Carter en la presidencia, EE.UU. tuvo una postura amistosa pero de creciente preocupación hacia el gobierno argentino.
“Honestidad y transparencia”
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció las desclasificaciones el pasado marzo durante una visita a Argentina que coincidió con el 40 aniversario del golpe militar que le dio el poder a la Junta.
“Creo que tenemos la responsabilidad de hacer frente al pasado con honestidad y transparencia“, declaró Obama en aquella ocasión.
Una porción inicial de los documentos, los mismos que se han dado a conocer ahora, fueron presentados al presidente argentino Mauricio Macri por el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, la semana pasada en Buenos Aires.
La difusión de este lunes”supone un paso importante hacia la búsqueda de la verdad, justicia y rendición de cuentas histórica“, le dijo al diario estadounidense The Washington Post Carlos Osorio, director del proyecto del Cono Sur en la organización Archivo de Seguridad Nacional.
Otras desclasificaciones previas relacionadas con Chile, Guatemala y El Salvador revelaron no sólo información sobre cómo operaron los gobiernos militares de dichos países sino en qué medida Estados Unidos los apoyó.
Muchos de los documentos publicados ahora corresponden a deliberaciones sobre políticas de la Casa Blanca y proceden de la biblioteca presidencial de Carter.
En el margen de un año se desclasificarán documentos de las bibliotecas de los expresidentes Gerald R. Ford, Ronald Reagan y George H.W. Bush.
El esfuerzo de desclasificación “involucra a 14 agencias y departamentos del gobierno estadounidense“, liderados por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional y la Casa Blanca, y está dividido en cinco líneas de trabajo, según informó el Departamento de Estado en un comunicado.
EE.UU. ya había hecho públicos en 2002 unos 4.000 documentos sobre la llamada “guerra sucia” en Argentina, pero en aquel momento no entregó aquellos que consideraba clasificados.