Luego los equipos de reporteros y fotógrafos van en busca de las noticias, las cuales se redactan y editan más tarde. Después, la información se envía a los diseñadores, quienes, con fotografías y texto, arman las páginas de forma visualmente agradable al lector.
Muchas veces el contenido va acompañado de una ilustración o infografía, de la cual se encarga la Sección de Arte. Las notas que escriben los redactores son revisadas en la Sección de Corrección y Estilo, que se encarga de velar porque estén apegadas a las normas ortográficas y gramaticales.
Al finalizar estos procesos, las páginas se envían al área de Producción, donde laboran unas 440 personas en los departamentos de Preprensa, Impresión, Operaciones y Mantenimiento.
Maquinaria gigante
La primera rotativa de Prensa Libre fue llamada Huracán, porque imprimía mil 500 ejemplares por hora. En 1963 se adquirió una Goss universal, que imprimía 30 mil ejemplares de 64 páginas por hora. Tiempo después se compraron otros monstruos: una Harris 845 —que hasta ahora imprime el primer tiro y la portada— y una Goss, que imprime 42 mil ejemplares por hora.
Antes de ese proceso, la información generada en la Redacción debe pasar por Preprensa, donde participan digitalizadores, paginadores, reveladores y técnicos de calidad. Las páginas se montan sobre placas especiales que luego les servirán a las rotativas para imprimir.
Después intervienen otros técnicos que se encargan de controlar la producción. Las páginas impresas se compaginan, y luego la empresa Transborsa distribuye Prensa Libre en todo el país, también con la ayuda de sectoristas y voceadores.
El sistema ófset se emplea en Prensa Libre desde 1975. Desde entonces los tipógrafos tuvieron que alimentarse de otros conocimientos para adaptarse a la nueva tecnología.
¿Cómo lo hacían?
Antes, Prensa Libre se producía por el sistema tipográfico. Básicamente, el área que más ha variado desde entonces es Preprensa. La información era levantada con linotipos —un tipo de máquina de escribir que contiene plomo derretido—.
De ellos salían barras que se trasladaban a una rotativa tipográfica. Se imprimía por pliegos. Entonces, la capacidad de impresión era de cuatro mil ejemplares por hora.
En esa época los espacios editoriales eran “cuadrados”, pues las personas encargadas de formatear el periódico debían prácticamente armar un rompecabezas en el que participaban compaginadores, fotomecánicos e insoladores.
Hitos en impresión
- 1951: Primeras ediciones impresas con linotipo en Imprenta Iberia
- 1953: Adquisición de primera rotativa “Huracán”, con capacidad de imprimir 1,500 ejemplares por hora.
- 1963: Se adquiere rotativa Goss Universal, con capacidad de impresión de 30,000 ejemplares por hora.
- 1978: Adquisición de rotativa Goss Urbanite con sistema Offset.
- 1988: Se adquiere la rotativa Harris Cottrell 845.
- 1998: Cambio de sistema fotomecánico a sistema digital CTF (Computer to Film).
- 2004: Cambio de sistema de CTF por el sistema CTP (Computer to plate) impresión directo a placa.
- 2010: Miembros del Club de Calidad. Certificación obtenida por ser uno de los mejores impresores de periódicos del mundo.
- 2011: Certificación ISO, primer periódico en América en obtener esta acreditación por su calidad de impresión.
- 2012: Certificación internacional Wan Ifra por periódico mejor impreso.
- 2013: Miembros del Star Club, seis estrellas por la excepcional calidad de impresión.