Transcurría el domingo 17 de junio de 2001, cuando 78 reos de alta peligrosidad, armados con fusiles AK-47 y subametralladoras Uzi, escaparon de la Cárcel de Alta Seguridad de Escuintla, conocida como “El Infiernito”, en una violenta fuga que dejó un custodio, una agente de la Policía Nacional Civil y un reo muertos.
La fuga se produjo en el sector “A” a las 13 horas, durante el horario de visitas. Entre los fugitivos se encontraban miembros de las bandas delincuenciales más peligrosas, como Los Pasaco, El General, Agosto Negro, El Indio y El Canguro.
Los delincuentes interceptaron un autobús que transitaba cerca de la entrada a la Granja Penal Canadá. Al llegar al km 69 hicieron que los pasajeros abordaran otro bus, mientras ellos continuaron su camino hasta el kilómetro 76, donde se perdieron entre los matorrales y el río que pasa por la finca Rancho María.
Otro grupo de prófugos se apoderó de una camioneta agrícola y un automóvil tipo sedán. La camioneta fue interceptada por la Policía, lo que produjo una balacera que terminó con la muerte de uno de los reos.
Meses después las fuerzas de seguridad lograron la captura de la mayoría de los delincuentes, mientras otros murieron por diferentes causas.
Se abrió un juicio por la supuesta complicidad de los guardias penitenciarios y directivos de dicho penal, quienes a cambio de recibir una cuantiosa suma de dinero habrían facilitado la fuga de los reclusos.
Cuantiosa recompensa
El 6 de diciembre de 1954, la Guardia Judicial ofreció una recompensa de Q20 mil a la persona que capturara o proporcionara información de José María Yela Menéndez y José María Coronado Cervantes, acusados del asesinato de Atenales Ruiz, pagador del Hospital General. Los reclusos se fugaron durante la madrugada de la cárcel ubicada en la estación de la Guardia Civil.
Los reos pertenecían a la banda “Los caballeros de la media noche”, y se dedicaban al robo de viviendas.
La autoridades de entonces realizaron una investigación que determinó que los reclusos fueron ayudados por personal de la prisión para lograr escapar.