“Lo que está en riesgo es la seguridad de cientos de millones de personas que cumplen con la ley y el establecer un peligroso precedente que amenaza las libertades civiles de todo el mundo” , destacó Cook en el citado correo.
Apple se negó la semana pasada a facilitar el acceso del Gobierno a un iPhone en el centro de una investigación terrorista.
El iPhone en cuestión fue usado por uno de los autores del tiroteo de diciembre pasado en la ciudad californiana de San Bernardino (EE.UU.) , en el que murieron 14 personas.
La jueza federal Sheri Pym ordenó el martes de la semana pasada a Apple ayudar a los agentes del Buró Federal de Investigación (FBI) a acceder a los datos en el teléfono.
Y el Departamento de Justicia fue un paso más allá el viernes al presentar una moción para obligar a la empresa tecnológica a que cumpla con lo solicitado por los tribunales.
La moción llega antes incluso del plazo límite del 26 de febrero que tiene Apple para responder formalmente a la magistrada Pym.
Apple sugirió a la Casa Blanca, en una serie de preguntas y respuestas publicadas en su sitio web, crear una comisión gubernamental para evaluar los problemas generados por el creciente uso de la encriptación.
“Nuestro país siempre ha sido más fuerte cuando está unido” , asegura Apple en una información publicada hoy en su sitio web, donde dice que la mejor forma de avanzar en este caso sería que el Gobierno “retire” sus exigencias y forme una comisión o algún tipo de panel para evaluar la situación.
“Apple participaría encantada en un esfuerzo de ese tipo” , aseguró la compañía.
La empresa recuerda que lo que pide el Gobierno a la compañía es desarrollar una nueva versión de su sistema operativo iOS para esquivar las protecciones de seguridad cuando la pantalla del teléfono está bloqueada.
Apple subraya que se crearía una función nueva al permitir que se introduzcan las contraseñas de forma electrónica y no manualmente.
La firma destaca que el acceder a la petición tendría dos repercusiones “peligrosas” .
“La primera es que el Gobierno haría que escribiésemos un sistema operativo completamente nuevo para su uso” , afirmó Apple, que recordó que una vez hecho eso el FBI podría desbloquear el teléfono mediante el uso de “fuerza bruta” , como se llama al sistema electrónico que usan miles o millones de contraseñas hasta averiguar la combinación correcta.
La segunda de las consecuencias “peligrosas” sería, según Apple, el establecer un precedente legal que ampliaría los poderes del Gobierno.
“No sabemos a dónde nos conduciría eso” , advirtió la empresa de Cupertino (California) .
Facebook solidario con Apple
El fundador y director ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg, se mostró “solidario” con el gigante tecnológico Apple en su pugna con las autoridades estadounidenses por no colaborar en la desencriptación del iPhone del autor del tiroteo de San Bernardino.
“No creo que (…) sea una manera efectiva para incrementar la seguridad ni que sea realmente lo que se tiene que hacer. Soy bastante solidario con Tim Cook (director ejecutivo de Apple) y Apple” , dijo en una conferencia en el Congreso Mundial de Móviles de Barcelona.
Apple apoya crear panel de expertos
La compañía Apple anunció este lunes que aceptaría que un panel de expertos se pronuncie sobre el acceso a datos protegidos de teléfonos móviles, si las autoridades estadounidenses renuncian a obligarla a darles acceso al iPhone de unos de los atacantes de San Bernardino, California.
En un comunicado publicado en su sitio web, Apple reafirma su oposición a los intentos del gobierno estadounidense de obligarla a ayudar al FBI en su investigación sobre los atentatos de San Bernardino, pero también sugirió la posibilidad de llegar a un compromiso en la batalla legal de enorme alcance político.
En diciembre del 2015 Syed Farook y su mujer, Tashfeen Malik, mataron a 14 personas en una fiesta navideña en San Bernardino, California, y hasta la fecha el FBI sigue sin poder acceder a los datos encriptados de uno de los teléfonos de los asesinos.
El Departamento de Justicia presentó el viernes una segunda demanda para que la justicia obligue a Apple a ayudar a los investigadoes a desbloquear ese iPhone, desatando una controversia y una batalla legal sobre el acceso a datos protegidos.
Apple ha alegado que la orden de un magistrado crearía una “puerta secreta” que podría debilitar la seguridad de los aparatos de sus miles de usuarios.
La nueva presentación del gobierno ante la justicia afirma que Apple basa su defensa en “preocupaciones de marketing” y que a la compañía no se le ha pedido que entregue algún software sensible que pueda ser usado por hackers.
En su comunicado divulgado, Apple aclaró ahora que “el mejor camino para el gobierno sería retirar sus demandas (…), como propuso alguien en el Congreso (y) formar una comisión u otro panel de expertos en inteligencia, tecnologías y derechos civiles para discutir las implicaciones en materia legal, de seguridad nacional, privacidad y libertades individuales” .
“Apple participaría con mucho gusto en una iniciativa de ese tipo” , agregó.
El comunicado de la empresa, el último capítulo de la batalla en torno a la protección de datos, sostiene que una orden judicial que obligue a Apple a permitir ese acceso “establecería un antecedente legal que ampliaría los poderes gubernamentales que simplemente no sabemos a dónde nos conduciría” .
Al respecto, Josh Earnest, portavoz de la presidencia estadounidense, dijo el miércoles que “el Departamento de Justicia no le pide a Apple que modifique su producto o cree un medio indirecto para acceder a uno de sus productos” , sino que “simplemente pide algo que tendría un efecto en este aparato concreto” .
En un memorando a los empleados de Apple, también divulgado este lunes, su director ejecutivo, Tim Cook, aseguró que la empresa no reduciría sus dispositivos de seguridad incluidos en sus teléfonos que solo permiten al titular ingresar a él.
Cook y James Coney, director del FBI, fueron invitados a declarar ante el Congreso.
Coney dijo este lunes que el tema legal “es muy acotado específico (…), simplemente queremos tener la oportunidad, con una orden judicial, de intentar acceder a la palabra clave del terrorista sin que (el contenido de) el teléfono se autodestruya y sin que nos lleve una década. Es eso” .