“Nosotros redirigimos el transporte (de drogas) fuera del aire y del agua y entonces todo se guió a tierra y yo me disculpo por ello”, dijo Clinton frente a estudiantes, empresarios y políticos mexicanos.
Clinton expresó su deseo de que los mexicanos “no tuvieran problemas, pero todo el mundo tiene problemas y no hay que olvidar sus aspectos positivos, sus activos”.
Sus palabras se registran en momentos en los que México aún está conmocionado por la desaparición el 26 de septiembre pasado en Iguala (Guerrero, sur) de 43 estudiantes tras ser baleados por policías y sicarios, y que la fiscalía ha concluido que fueron masacrados por el cartel de drogas local Guerreros Unidos.
El 11 de diciembre académicos y activistas efectuaron un foro en Washington para exponer las responsabilidades de Estados Unidos en la concentración del narcotráfico en México, y algunos de ellos señalaron a Bill Clinton como uno de los presidentes estadounidenses cuyas políticas antidrogas más detonaron el incremento del trasiego de drogas en este país.