Brasil podrá olvidarse un tiempo de sus problemas desde este viernes, cuando el Rey Momo se convierta en alcalde de Rio y decrete varios días de fiesta y excesos, tras recibir las llaves de la ciudad de manos del mandatario local Eduardo Paes.
Casi un millón de turistas, el 70% brasileños, están llegando ya a Rio para participar en el Carnaval. Los hoteles estarán ocupados en un 76% y las festividades dejarán a la ‘Cidade Maravilhosa’ más de 1.200 millones de reales (420 millones de dólares).
– Adiós al estrés –
“El brasileño se prepara 361 días para el Carnaval. Son cuatro días en los que el país se libera del estrés acumulado durante todo el año”, explicaba este jueves el bailarín y coreógrafo Carlinhos de Jesus a la televisión Globo.
El apogeo de la fiesta tendrá lugar en la noche del domingo y del lunes, cuando desfilen las mejores 12 escuelas de samba (seis cada día) para competir por el título de campeona del Carnaval.
En los barracones de la escuela Mangueira en la ‘Ciudad de la Samba’ de Rio, decenas de personas -los hombres con el torso desnudo y sudoroso debido al insoportable calor-, pintan, cortan, pegan y cosen los disfraces y los gigantescos carros alegóricos.
Para las bailarinas es el último ensayo previo al desfile ante más de 70.000 espectadores en el Sambódromo. Mangueira rendirá homenaje este año a la belleza de la mujer brasileña.
“La mujer brasileña es una guerrera, una mujer que se levanta a las 05h30 de la mañana, que se ocupa de sus hijos. Estoy orgullosa de representar a la mujer brasileña y también a la mujer de Mangueira”, dijo a AFP la bailarina Daniela Suares, que exhibía su escultural cuerpo engalanado con polvos dorados.
Cada escuela cuenta con entre 3.000 y 5.000 participantes en el desfile. Mangueira, conocida por sus colores verde y rosa, es una de las más antiguas y populares.
Las jóvenes sambistas ensayan una y otra vez la coreografía que deberán bailar a lo largo de los 700 metros del Sambódromo, que será evaluada por un estricto jurado.
Para elegir a la campeona del Carnaval se evalúan 10 criterios, entre ellos la música, la pareja de portabanderas de la escuela y la ‘Reina de la batería’, que danza sola delante de cientos de percusionistas.
– ‘Boom’ del carnaval de calle –
Pero la famosa ‘Avenida Sapucaí’, como se conoce al Sambódromo, reservado a los turistas y a los brasileños más acomodados que pueden pagar las costosas entradas, no tiene el monopolio de la fiesta.
Por todo el país, los brasileños se lanzan a las calles en ‘blocos’ o grupos de carnaval callejero que toman de asalto los barrios de las ciudades con increíbles disfraces, a ritmo de samba, cerveza y mucha seducción.
El mayor de todos, el Cordao de Bola Preta, espera reunir a cerca de un millón y medio de fiesteros a las 09h00 de la mañana en el centro de Rio.
Con la fiesta, al menos por unos días quedan atrás los problemas como el mal desempeño de la economía, que no creció en 2014 según las últimas previsiones del mercado, la sequía que afecta el sureste del país o el gigantesco escándalo de corrupción en la estatal Petrobras, que habría beneficiado al gobernante Partido de los Trabajadores y a sus aliados.
Pese a todo, una de las máscaras más vendidas en esta edición es la de la expresidenta de Petrobras Graca Foster.
Rio de Janeiro prolongará este año su Carnaval para celebrar en gran pompa el 450º aniversario de su fundación el 1 de marzo.
“Se extenderá el Carnaval, que ya dura entre tres y cuatro semanas, al fin de semana del 28 de febrero y 1 de marzo”, anunció esta semana el alcalde Eduardo Paes.
Una escuela de samba, la tradicional Portela, centrará su desfile en la fundación de Rio en 1565 y en una interpretación surrealista de las tarjetas postales de la ciudad, como el Pan de Azúcar y el estadio Maracaná, inspirada en artistas como Salvador Dalí.