Cuando Estados Unidos anunció este programa de formación a principios de 2015 evocó el objetivo de formar a 5.000 combatientes por año.
Pero los militares estadounidenses se enfrentan a las dificultades de selección y de filtro de candidatos, debido al rigor que se necesita para no correr el riesgo de que los combatientes que ellos formen se den vuelta contra Estados Unidos.
Según las cifras más recientes comunicadas por el Pentágono, 3.750 sirios presentaron sus candidaturas para ser entrenados, de los cuales 400 pasaron el primer filtro. Luego se enfrentarán a otra selección.
de sirios han sido desplazados por los conflictos en Siria, que se han cobrado la vida de 220 mil personas.
El Congreso estadounidense aprobó el financiamiento de este programa por 500 millones de dólares.
Estados Unidos había anunciado que cerca de 1.000 soldados serían desplegados para entrenar a los rebeldes sirios “moderados” pero hasta ahora solo hay 450 en el lugar, según funcionarios estadounidenses.
Algunos de sus socios en la coalición le reprochan a Estados Unidos querer dirigir la acción de los rebeldes contra el EI en detrimento del combate contra el régimen de Bashar al Asad.