En su gira estatal, el presidente estadounidense insistirá en este mensaje económico dirigido a las clases medias y bajas, a las que sitúa como beneficiarias de su principal caballo de batalla en esta legislatura: facilitar el progreso y reducir la pobreza.
En Maryland, la primera parada de su gira, el presidente explicará sus propuestas para elevar el salario mínimo, que incluyen el incremento por decreto del sueldo mínimo de algunos trabajadores federales a 10.10 dólares la hora.
No obstante, para aumentar el de todos los trabajadores, actualmente en 7.25 dólares, Obama necesita que el Congreso actúe al respecto, algo que no ocurrió en 2013, cuando el presidente hizo esta misma promesa en su discurso sobre el Estado de la Unión.
Obama explicará en varios estados el paquete de decretos que anunció anoche, de alcance bastante limitado, para que 2014 sea “un año de acción” , tras un 2013 en el que vio desvanecerse sus grandes propuestas al topar con la hostil Cámara de Representantes, dominada por los republicanos.
En Pensilvania, su segundo destino en esta gira, detallará la puesta en marcha de un programa para ayudar a los estadounidenses a ahorrar para la jubilación.
Las propuestas económicas que afectan a las clases medias y bajas del país centraron el discurso de Obama, quien insistió al Congreso en la urgencia de renovar los subsidios a los desempleados de larga duración, que expiraron en diciembre.
Asimismo, el presidente de EE. UU. propuso extender un beneficio fiscal del que disfrutan las familias de bajos ingresos a las personas que no tienen hijos, una idea bien vista por algunos republicanos y economistas conservadores.