Greste, al que expulsaron de Egipto, tomó un avión con rumbo a Chipre junto a su hermano Michael, según fuentes aeroportuarias. Las autoridades egipcias lo detuvieron en diciembre del 2013 con el egipcio-canadiense Mohamed Fahmy en una habitación de hotel de El Cairo donde habían instalado, “sin autorización” según la acusación, una oficina de Al Yazira. Poco después, la policía arrestó al egipcio Baher Mohamed, otro periodista del canal de noticias catarí.
Los tres hombres fueron condenados en junio del 2014: Greste y Fahmy a siete años de prisión, y Mohamed a 10. Su condena suscitó mucha indignación entre la comunidad internacional.
Las detenciones se produjeron en plena crisis entre Egipto y Catar, tras el derrocamiento y arresto del presidente islamista Mohamed Morsi por parte del ejército.
Al Yazira, que realizó una amplia cobertura de las manifestaciones de los partidarios del mandatario islamista, fue acusada de “apoyar” a los Hermanos Musulmanes, cuyos simpatizantes comenzaron a sufrir una violenta represión, al tiempo que el movimiento era declarado “organización terrorista” por el nuevo Gobierno.