“Blue Origin completó hoy con éxito su 15ª misión consecutiva de ida y vuelta al espacio y llevó a cabo una serie de simulaciones para ensayar los movimientos de los astronautas y las operaciones para futuros vuelos con clientes a bordo”, dijo la firma este miércoles (14.04.2021).
“Esta misión marcó un paso de verificación antes de hacer volar a los astronautas”, según el comunicado. La prueba se llevó a cabo desde el Sitio de Lanzamiento Uno de Blue Origin, en el oeste de Texas.
El cohete con la cápsula acoplada alcanzó una altura de unos 105 kilómetros antes de regresar a la Tierra.
Personal de Blue Origin se hizo pasar por astronautas
Por primera vez, el personal de Blue Origin que se hizo pasar por astronautas entró en la cápsula antes del lanzamiento y realizó una serie de pruebas desde dentro de la cápsula. No obstante, los sacó poco antes de enviar la cápsula al borde del espacio con solo un maniquí de prueba.
Tras el aterrizaje de la cápsula de la tripulación, los astronautas ensayaron los procedimientos posteriores al vuelo, la apertura de la escotilla y la salida de la cápsula.
Blue Origin quería ver lo bien que una tripulación podía entrar y salir de la cápsula. Los falsos astronautas también probaron los cinturones de seguridad y los enlaces de radio antes del vuelo de 10 minutos, y volvieron a la cápsula tras el aterrizaje para subir a bordo para practicar la recuperación.
“Muy cerca” de llevar a turistas y otras personas al espacio
Aunque hoy no hay astronautas a bordo, ha sido un paso decisivo en nuestro camino hacia el primer vuelo humano”, dijo la comentarista de vuelos Ariane Cornell desde la sede de la empresa en Kent, Washington. La empresa está “muy cerca” de hacer volar pasajeros, señaló.
El objetivo de Blue Origin es llevar a los clientes de pago en saltos cortos que proporcionen tres minutos de ingravidez. Las ventanas constituyen un tercio de la cápsula de seis plazas.