Por eso, “en el siglo pasado las ideologías terminaron en dictaduras, piensan por el pueblo, no dejan pensar al pueblo”, lamentó en el Estadio Leon Condou, en el que estaba presente el presidente paraguayo, Horacio Cartes.
Economía con rostro humano
Tras un encuentro con representantes de diferentes sectores de la sociedad civil en Asunción, el pontífice respondió algunas preguntas que le hicieron llegar los participantes.
Francisco aseguró que “la corrupción es la gangrena de un pueblo” y sostuvo que “el desarrollo económico tiene que tener rostro humano”.
Niñas se acercan al Papa Francisco para abrazarlo 😃😃😃😃😃 #Paraguay pic.twitter.com/uHUZIo8bNY
— Priscilla Quiroga S. (@Prisi41Quiroga) July 11, 2015
A su vez pidió a los presentes que “no cedan a un modelo económico idolátrico que necesita sacrificar vidas humanas en el altar del dinero”.
Al referirse a los pobres, en quienes recordó se refleja el rostro de Cristo, llamó a ponerse en su piel: “Podría estar en ese lugar y estaría deseando que alguien me ayude”.
El papa pidió enfáticamente “respetar al pobre, no usarlo como objeto para lavar nuestras culpas”.
Durante su alocución también dedicó un extenso pasaje a los jóvenes: “Me da mucha tristeza ver a un joven jubilado. Qué importante es que ustedes los jóvenes… vayan intuyendo que la verdadera felicidad pasa por la lucha de un país fraterno”.
Francisco, conocido por su pasión por el fútbol, utilizó una figura relacionada con ese deporte para llamar a los jóvenes paraguayos a comprometerse por el bien de la sociedad: “A jugársela por algo, a jugársela por alguien, esa es la vocación en la juventud. No tengan miedo de entregar lo mejor de sí. No coimeen (sobornen) al referí”.