Las empresas de Williams consiguieron acceso a altos funcionarios y a la mansión del gobernador para celebrar eventos promocionales de suplementos alimenticios, no aprobados por la Administración para Alimentación y Drogas de EE. UU. (FDA, en inglés) .
El exgobernador y su esposa han sido acusados de 14 delitos, entre ellos fraude, falso testimonio, obstrucción a la justicia y obtención de propiedades aprovechando su cargo.
“Me arrepiento por haber recibido regalos legales y préstamos que fueron pagados con intereses, me he disculpado por mis decisiones y me hago responsable de ellas, pero repito que no hice nada ilegal”, indicó en un comunicado el exgobernador, de 59 años, una de las figuras más valoradas entre los republicanos antes del escándalo.
La compañía de Williams, Star Scientific, contribuyó con decenas de miles de dólares a las campañas políticas de McDonnell y pagó incluso gastos de la boda de una de las hijas del exgobernador.
McDonell pagó el verano pasado US$50 mil de un préstamo de Williams a su esposa, así como US$70 mil a una empresa que el exgobernador posee junto con su hermana.