Internacional

Juicio a pareja acusada de matar a su hija adoptiva china

El juicio a una pareja de españoles, acusados de haber asesinado a su hija adoptiva de 12 años de origen chino tras haberla drogado durante meses, comenzó el martes último en la capital gallega, Santiago de Compostela, en el noreste del país.

La abogada Rosario Porto y su exmarido, el periodista Alfonso Basterra, podrían ser condenados a una pena de hasta 20 años de cárcel por “asesinato”.

El martes no estaba previsto que comparecieran ante el tribunal, ya que la jornada se dedicó a la elección del jurado popular.

Este juicio, que se desarrollará hasta el 21 de octubre en la Audiencia Provincial de La Coruña, llega dos años después del descubrimiento del cadáver de Asunta Yong Fang Basterra Porto, adoptada cuando era una bebé.

Su cuerpo fue descubierto el 22 de septiembre del 2013 por unos senderistas en una pista forestal de la localidad de Teo, cerca de Santiago de Compostela.

En julio del 2014, el juez de instrucción concluyó que los padres de Asunta le habían administrado durante varios meses un medicamento sedante.


En julio del 2014, el juez de instrucción concluyó que los padres de Asunta le habían administrado durante varios meses un medicamento sedante.

Según el auto del magistrado, el 21 de septiembre del 2013, día del asesinato, “le suministraron una cantidad del medicamento indicado necesariamente tóxica para posteriormente cuando hiciera efecto asfixiarla”.

Su cuerpo fue abandonado en la pista forestal cercana a Teo, según el magistrado, que basa sus afirmaciones en los análisis toxicológicos, los resultados de la autopsia y declaraciones de testigos.

Los dos acusados siempre han negado haber cometido el asesinato, pero se han acusado mutuamente de haber drogado a la niña.

El asunto levantó una viva indignación en España. 

Los móviles del crimen siguen siendo inciertos, ya que una primera hipótesis sobre una herencia de los abuelos maternos, de los que Asunta habría podido ser beneficiaria, fue descartada.

Los dos acusados siempre han negado haber cometido el asesinato, pero se han acusado mutuamente de haber drogado a la niña.


El juez de instrucción se refirió a una pareja separada que mantenía unas relaciones complejas.

Los acusados podrían empezar a declarar a partir del miércoles.

Y desde el lunes comparecerán ante el tribunal 84 testigos y 60 expertos, entre ellos, varias personas que constataron que la víctima estaba drogada, según una fuente judicial.

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