Luego de que los obreros le dijeran al encargado del lugar que necesitaban mover el vehículo para seguir construyendo la acera, este les respondió que no tenía autorización para mover el carro.
El encargado del consecionario se sorprendió unos momentos después cuando encontró el automóvil incrustrado en el cemento fresco de la nueva acerca construida.
Con información de tiempo.hn