El pasado 15 de julio, un fallido alzamiento militar contra Erdogan dejó 272 muertos. Su gobierno ha respondido con la detención de cerca de 26 mil simpatizantes del predicador Fethullah Gülen, a quien Ankara acusa de instigar la intentona golpista.
Maduro aseguró que, en un escenario similar, pondría “orden y autoridad con la ley a nivel nunca antes visto” en Venezuela.
“No lo digo por decirlo. Estoy preparado para hacerlo y me sabe a casabe (no me importa) lo que diga la OEA y el imperialismo norteamericano”, agregó.
“Atrévanse, que aquí está la clase obrera y el pueblo unido, quiero paz, quiero diálogo, quiero prosperidad y lo vamos a conquistar”, agregó.
Sin embargo, luego matizó sus palabras: “Quiero paz, quiero diálogo, quiero prosperidad”, dijo.
El chavismo ha acusado a la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de querer darle un golpe de Estado a Maduro.
La MUD intenta activar un referendo para revocar el mandato de Maduro este año como mecanismo democrático para acelerar el fin de su Gobierno.
La oposición venezolana se alista para marchar hacia Caracas el próximo 1 de septiembre, para exigir al poder electoral la fecha de recolección de cuatro millones de firmas necesarias para convocar un referendo revocatorio contra el presidente.
“Ya están activados en casi todo el país los comandos por el cambio”, declaró el jueves a periodistas Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Maduro aseguró que, en realidad, sus adversarios buscan “calentar la calle” para crear una situación de inestabilidad. “¡Atrévanse!”, advirtió.
erc/mis/cd