El opositor, de 67 años, fue condenado el año pasado a cinco años de prisión por sodomía, un crimen que puede ser castigado con penas de hasta 20 años de prisión en este país de mayoría musulmana.
Es la segunda vez que Anwar ha sido condenado por sodomía desde que cayó en desgracia al final de los años 1990, tras haber sido viceprimer ministro.
El caso examinado el martes por el tribunal federal se remonta a 2008, el año en que la oposición liderada por Anwar obtuvo un éxito histórico en las legislativas, desafiando por primera vez la supremacía de la coalición en el poder en Malasia desde hacía 50 años.
Anwar Ibrahim fue absuelto en 2012 por un tribunal, pero el año pasado el Estado malasio apeló la decisión. Esta iniciativa del gobierno fue muy criticada por las Oenegé de defensa de los derechos humanos y Estados Unidos puso en duda el funcionamiento del Estado de derecho en el país.
Anwar ha acusado en varias ocasiones al primer ministro, Najib Razak, de querer hacerle desaparecer del panorama político, aunque él lo niega.