La víctima mortal es una doctora que salió al encuentro del médico de 45 años, que entró en la clínica con su bata blanca y un arma en la mano y después se quitó la vida, según señaló el jefe de policía James O'Neill. El galeno había perdido su trabajo en la clínica después de haber sido acusado de acoso sexual.
Antes del tiroteo en el hospital situado en el barrio del Bronx, el médico escribió un mail al diario “New York Daily News” en el que responsabilizaba a la clínica de su carrera truncada. “Este hospital ha puesto fin a mi camino hacia la licencia (médica)” (…). Primero se me decía que siempre era un solitario y después que era por un enfrentamiento con una enfermera”.
La publicación señala que el médico fue despedido por haber acosado sexualmente a una trabajadora.
Según las informaciones, el médico abrió fuego en el piso décimo sexto de la clínica y se atrincheró un tiempo allí mientras la policía le buscaba. Los heridos, según CNN, son todos trabajadores del hospital.