Las mujeres, aglutinadas en unas cinco organizaciones feministas, lamentaron que se les responsabilice “por su propia muerte” y condenaron que las autoridades hondureñas señalen que éstas son asesinadas por “estar vinculadas al crimen organizado o en actividades ilícitas“.
“Nada justifica la muerte violenta de mujeres” en el país, subrayaron las féminas, que iban vestidas de color negro en señal de luto y gritaban “No nos callarán jamás“.
Las manifestantes colocaron ataúdes y bolsas para basura simulando un cuerpo frente a la entrada de la Casa Presidencial en memoria de las dos mil 192 féminas que han sido asesinadas en Honduras en los últimos cuatro años, según cifras de la Tribuna de Mujeres contra los Femicidios, que aglutina organizaciones no gubernamentales de féminas.