En las inmediaciones de la sede de la Nunciatura Apostólica en la capital mexicana, donde el Papa pernoctará todos los días de su visita al país, rentan cuartos para pasar algunas horas solo con el objetivo de que sus fieles estén más cerca de Francisco.
Hay quienes incluso ofrecen acceso a sus ventanas o en sus azoteas para aquellos que están ansiosos de verlo pasar.
En Morelia, la capital del estado de Michoacán y donde Francisco estará el martes, se ofrecen lugares en una terraza por unos US$42 para “no esperarlo parado” y con desayuno incluido.
En la Avenida Acueducto otro propietario puso en renta un salón que cuenta con cuatro balcones desde las 8 a las 17 hora local por US$1 mil 168, mientras que en la azotea el costo por persona asciende a US$53.
Además, en esta ciudad del oeste de México decenas de propietarios han puesto habitaciones en renta con precios que van desde los US$50 por noche e inclusive hay quienes alquilan casas completas por US$1 mil, ya que los cuartos de los hoteles están agotados desde finales de diciembre pasado.
San Cristóbal de las Casas, en el suroriental estado de Chiapas, también estará al tope de su capacidad hotelera en los próximos días con motivo de la visita del Pontífice el lunes, por lo que los residentes ya también ofrecen habitaciones en renta con precios que oscilan entre US$27 y US$53 por noche.
En la norteña Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos, los precios por las habitaciones de las viviendas llegan hasta los US$400.
En esta localidad, donde Francisco cerrará su visita a México el próximo miércoles, se espera la llegada de dos millones de personas procedentes del norte del país y del sur de Estados Unidos.
Las diócesis mexicanas repartieron en las últimas semanas un total de 882 mil 225 boletos gratuitos para ver a Jorge Mario Bergoglio durante todos los actos que llevará a cabo en el país en su primera como Pontífice.
