“Todo esto forma parte del tinglado que vienen preparando para acusarnos de desacato, convertir el desacato en flagrancia, la flagrancia en una especie de ilícito que afecta nuestra inmunidad” , aseguró Ramos Allup, al insistir en que la corte busca “allanar” la protección parlamentaria.
La Sala Constitucional del TSJ decidió suspender de manera cautelar “los efectos” y “actos” de esas sesiones, al admitir demandas de nulidad interpuestas por legisladores chavistas, que acusan a la directiva parlamentaria de incumplir el reglamento que exige convocar las reuniones con 48 horas de anticipación.
“No vamos a acatar ninguna sentencia o decisión de cualquier organismo que viole la Constitución y nos impide el derecho a la defensa” , sentenció Ramos Allup.
El dirigente opositor señaló que “al no poder recurrir a un organismo írrito” acude a la Fiscalía a “consignar los argumentos respecto de este insólito caso que lo que pretende es desconocer la voluntad popular expresada el 6 de diciembre” .
Venezuela vive un fuerte conflicto de poderes desde enero, cuando la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) asumió el control del Legislativo tras ganar las históricas elecciones parlamentarias de diciembre, que pusieron fin a 17 años de hegemonía chavista.
Desde que el Parlamento de contundente mayoría opositora se instaló el pasado 5 de enero, el Supremo venezolano ha tomado decisiones en las que suspende o anula los resultados de las sesiones legislativas.
“No puede ser que un organismo viciado de nulidad absoluta, como la Sala Constitucional del TSJ, trate de prelar o de tener vigencia por encima de la voluntad popular expresada en las últimas elecciones” , manifestó.
La polarización política que sufre Venezuela arreció luego de que la oposición empezara el proceso para impulsar un referendo contra el presidente Nicolás Maduro.