Sus declaraciones dejaron en claro que, al menos, no habrá ningún voto en el Senado, si bien continuarán las negociaciones entre demócratas y republicanos.
A lo largo de la jornada, tanto Reid como el líder de la minoría republicana del Senado, Mitch McConnell, han mantenido febriles negociaciones, aunque sin éxito, sobre un pacto bipartidista que prorrogue los recortes tributarios que vencen al terminar este año.
En el vaivén de ofertas, concesiones y recriminaciones durante todo el fin de semana, los republicanos han aceptado retirar de las negociaciones su exigencia de recortar los beneficios del sistema de Seguro Social —pensiones públicas— mediante una compleja y polémica fórmula rechazada por los demócratas.
A su vez, los demócratas han aceptado elevar de US$250 mil a US$400 mil el techo de ingresos por debajo del cual seguirían aplicándose las rebajas tributarias, pese a que los republicanos inicialmente insistieron en que los recortes impositivos se prorroguen incluso para los más ricos.
El “abismo fiscal” que amenaza a EE. UU. se refiere a una volátil combinación de una subida de impuestos y masivos recortes al gasto público, de no lograrse un acuerdo en el Congreso.
En una entrevista con el programa Meet the Press, de la cadena televisiva NBC, Obama se quejó de la presunta intransigencia de los republicanos y sugirió que su conducta en las negociaciones indica que solo velan por un sector influyente.