En una entrevista con un medio local y que reprodujo el medio RT, el mandatario confió que esa segunda vacuna sea segura y efectiva para combatir la pandemia.
Se trata de una solución desarrollada por el Centro de Investigación Véktor de Novosibirsk, mientras que la primera, la Sputnik V, provino del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú.
Sobre Sputnik V, Putin comentó que, sin su consulta, su hija se sometió a la vacuna. Un día después de la vacunación y 21 días después hubo aumento de temperatura. “Pero todo está bien”, dijo el jerarca.
“Es absolutamente obvio para nuestros especialistas que esta vacuna forma una inmunidad estable (y) aparecen anticuerpos”, dijo en la entrevista.
No obstante el optimismo de Rusia la Organización Mundial de la Salud (OMS) desconfía de la vacuna porque se ha saltado la fase tres -ensayos con humanos-.
Acelerar los progresos no debe significar poner en compromiso la seguridad” sanitaria, dijo en días recientes Tarik Jasarevic, portavoz del organismo.
Guatemala, por su parte, ha pedido estar en lista de receptores de la vacuna rusa, al tiempo que ha declarado que solo adquirirá las que cuenten con 100 por ciento de efectividad comprobada por la comunidad científica internacional.