En su discurso de Año Nuevo, el líder norcoreano, Kim Jong-un, anunció que próximamente quiere probar misiles intercontinentales capaces de portar cabezas nucleares.
“Nos encontramos en la fase final de los preparativos para el lanzamiento de prueba de un misil intercontinental”, dijo el líder norcoreano, sin precisar el momento en el que tendrá lugar ese ensayo.
Ya en marzo, Corea del Norte, aislada internacionalmente por su programa misilístico nuclear, había asegurado que disponía de la tecnología necesaria de reentrada de un misil de largo alcance en la atmósfera terrestre. Expertos militares dudan que Pyongyang controle realmente esa tecnología.
Clara advertencia
Corea del Sur consideró este martes que el presidente electo de Estados Unidos Donald Trump había lanzado a Corea del Norte una “clara advertencia” en lo que respecta al programa nuclear del país comunista.
“Corea del Norte acaba de asegurar que se encuentra en las fases finales del desarrollo de un arma nuclear capaz de alcanzar zonas de Estados Unidos. ¡Eso no ocurrirá!” , escribió el lunes Trump en uno de sus ya tradicionales tuits nocturnos.
El mensaje llega un día después de que el líder norcoreano, Kim Jong-un, afirmara que Pyongyang está en las “últimas fases antes de probar un misil balístico intercontinental” .
Kim aseguró en un mensaje de Año Nuevo el domingo que Corea del Norte es ahora una “potencia militar del Este que no puede ser alcanzada, ni siquiera, por el enemigo más potente” .
Washington ha prometido varias veces que no permitiría que Corea del Norte se convirtiera en Estado nuclear, pero jamás Donald Trump había dado a conocer de forma tan clara su postura al respecto.
“El mensaje del presidente electo Trump es importante ya que se trata de su primera mención al programa nuclear norcoreano y puede ser considerado como una clara advertencia” dijo a la prensa Cho June-Hyuck, portavoz del ministerio surcoreano de Exteriores.
Ese país asiático llevó a cabo dos pruebas nucleares y numerosos lanzamientos de misiles en el 2016, en su afán por desarrollar un sistema de armas atómicas capaz de golpear el territorio continental de Estados Unidos con una cabeza nuclear.
Los analistas están divididos respecto a la capacidad real de Corea del Norte para dotarse de una arma atómica, pero todos coinciden en que Pyongyang ha realizado enormes avances en este sentido desde que Kim Jong-un sucedió a su padre, Kim Jong-il, fallecido en diciembre de 2011.